Gracias a Lucas y a Lucio, quienes nos ayudaron a resolver algunos contratiempos durante nuestra estancia. Siempre atentos, con ganas de solucionar problemas, manteniendo una sonrisa y una excelente actitud. Gracias a ambos, un saludo.
En cuanto al restaurante, considero que es necesario contar con un manager que pueda instruir y capacitar al staff en temas de servicio. Aunque el personal es amable, el servicio deja mucho que desear. Esperar 30 minutos por un café y 50 minutos por un huevo pochado es excesivo, especialmente tratándose de un buffet, donde la carga de trabajo para el personal debería ser menor al enfocarse principalmente en las bebidas y alimentos calientes. Espero sinceramente que puedan mejorar este aspecto.